Las múltiples facetas
de Adrien Brody

El gigante de la actuación sobre el refinamiento de su oficio y el poder transformador de la moda.
Desde su primer trabajo remunerado como mago a los 12 años, Adrien Brody se ha ido forjando un nombre como uno de los grandes actores de su generación. Ahora, a sus 51 años, su amplia producción creativa, ya sea componiendo, pintando o vistiendo, vuelve a estar en el punto de mira. "Todo bebe de la misma fuente", nos dice el actor. "Al principio no vi el paralelismo, pero luego, me di cuenta de que se alimentan mutuamente y provienen de la misma fuente de inspiración".
Desde sus humildes comienzos en Queens, Nueva York, como actor por encargo hasta las juntas directivas del West End, Brody ha ido acumulando una gran cantidad de experiencias, observaciones y recuerdos, construyendo sobre ellos para convertirse en una de las estrellas más reconocibles de la industria. Sus actuaciones recuerdan el mismo magnetismo y complejidad de los grandes actores que creció viendo y ahora inspiran esa misma magia para la próxima generación.
Nos sentamos con Adrien, y su perro Ziggy, para hablar sobre el arte de la actuación, el poder transformador de la moda y las múltiples facetas de la extraordinaria vocación a la que ha "dedicado su vida".
"La actuación es cuestión de capas... piezas y cosas que he encontrado y que me han tocado emocionalmente".
COMIENZOS
Todo empezó en la línea J del metro, la que pasaba por mi barrio en Queens. Me hizo comprender el carácter y las distintas cualidades individuales de la humanidad. Me dio esa curiosidad que es esencial en la representación de seres humanos.
Empecé a hacer magia antes de ser actor. Trabajaba de mago en fiestas infantiles. Me enseñó a entender la actuación, era una especie de monólogo. Mantener la atención del público, la ilusión, todo eso fluye en el trabajo cinematográfico porque en el cine también hay un poco de ilusionismo, en lo que debe revelarse y lo que no se puede revelar a la cámara y, por lo tanto, al público.
INSPIRACIÓN
Mi padre solía llevarme a Chinatown en Nueva York, a Canal Street para ir al cine. Veíamos películas antiguas de artes marciales juntos y películas de los años 70 y 80. Crecí con grandes películas: Francis Ford Coppola y Martin Scorsese, Robert De Niro, Al Pacino y Christopher Walken. Son historias auténticas, llenas de carisma, fragilidad y fuerza. Representaban, por una parte, la ciudad en la que estaba evolucionando y creciendo y, por otra, un estilo de trabajo que admiraba, una búsqueda de la verdad pero a la vez haciendo un trabajo de carácter muy específico que les pertenecía a los actores. Cuando veo a alguien hacer eso, me cautiva, no puedo evitarlo. Es lo que siempre he admirado de los actores, especialmente de esa generación con la que crecí.
UN SIGNIFICADO MÁS PROFUNDO
La complejidad y los personajes es lo que me atrae de un papel. También busco un significado más profundo, tiene que ser algo más que un viaje interesante para mí, tiene que tener algo que ofrecer, ya sea algo socialmente relevante, grande o conmovedor.
"En el escenario, todos dejamos de lado nuestros problemas y distracciones. Nos centramos en el momento y en los ojos del otro, y nos enfocamos, y damos, y entregamos, y lo compartimos con el público".
EL ESCENARIO
Hacer una obra en el West End ha sido enriquecedor para mi vida y mi trabajo. Fue un placer estar con tanta gente a la que le apasiona actuar, que se dedica a ello en cuerpo y alma y que dominan el arte de una manera en la que yo no estoy tan familiarizado. En el escenario, todos dejamos de lado nuestros problemas y distracciones. Nos centramos en el momento y en los ojos del otro, y nos enfocamos, y damos, y entregamos, y lo compartimos con el público. ¡Luego te vas a casa, respondes a unos cuantos emails y tratas de recomponerte un poco!
CONSEJO
Me encantaría que [la próxima generación] me viese como yo veía a los actores de una o dos generaciones anteriores a la mía. Es muy emocionante para mí conocer a un actor o actriz más joven. Una vez me paró un chico en la calle en Londres que se dirigía al Donmar Warehouse, ¡cuando yo iba a comprarme un sándwich! Me sentí inmensamente agradecido de que alguien que ama y aspira a hacer lo que yo amo y aspiro a hacer, y a lo que he dedicado mi vida, haya encontrado ese nivel de aprecio y conexión en un trabajo que he hecho yo. Fue muy emocionante para mí.
CREATIVIDAD
He pintado y dibujado desde que era pequeño y después empecé a hacer música. No veía el paralelismo, pero en realidad todo es cuestión de capas. La actuación también es cuestión de capas… Piezas y cosas que he encontrado y que me han tocado emocionalmente o me han dejado un recuerdo marcado. Lo integro todo y pongo una cosa sobre la otra.
Durante la pandemia, hice un montón de collages. Me quedaba en casa, cocinaba y hacía collages en el suelo hasta que no podía más. Me dolían las manos. Me dolía la espalda. Seguí sumergiéndome en ello y fue una verdadera bendición. Me abrió la mente a una comprensión completamente nueva de lo que tenía que hacer con mi trabajo.
VESTUARIO
A veces tienes menos control en esas decisiones, y a veces es muy colaborativo y trabajas con alguien que es un auténtico visionario, como Wes Anderson y Milena Canonero, que es una diseñadora de vestuario increíble. Su visión, y la visión de él, determinan el aspecto de esos personajes de manera bastante específica, y son maravillosos y únicos.
ESTILO PERSONAL
Me pongo lo que siento que es correcto en el momento. Definitivamente tengo un sentido del estilo distinto y tengo mucha ropa. Cuando me preparaba para un papel, tenía un armario lleno de prendas muy distintas que nunca me ponía en público en mi vida personal. Eran prendas enfocadas a hacer personajes, así que cuando tenía un casting, me disfrazaba del personaje por así decirlo, como por ejemplo con una camisa del oeste o con algo que nunca me pondría en mi vida personal.
EL PODER TRANSFORMADOR DE LA MODA
Fui a un casting y llevaba una camiseta blanca lisa y algo de color caqui. Y llevaba puestas unas gafas aviador. Cuando me las quité, recuerdo verme reflejado en la puerta metálica del ascensor al terminar el casting final, y vi esa imagen de mí como si fuera el personaje, no yo mismo. Me sentí desconcertado, todavía tambaleándome por las emociones de ese soldado y la complejidad de lidiar con el miedo y el horror de la guerra. Me conmovió mucho esa imagen, fue totalmente transformadora.
PREGUNTAS RÁPIDAS
COS
¿Teatro o cine?
AB
Ambos.
COS
¿Cuál es tu película favorita de todos los tiempos?
AB
El Padrino 2.
COS
Tu parte favorita de Londres
AB
Los teatros, el Donmar Warehouse.
COS
Pedido típico al servicio de habitaciones del hotel
AB
Sándwich club y patatas fritas.